Ander Caballero, fundador de Shinova, rompió su silencio cuatro meses después de su salida de la banda acusando a sus excompañeros de expulsarlo "injustamente" y actuar como "buitres", según un comunicado en Instagram. "Nadie tiene derecho a borrar mi trabajo de 17 años", declaró, anunciando acciones legales contra Gabriel de la Rosa, Daniel del Valle, Erlantz Prieto y Joshua Froufe por "decisiones arbitrarias". Shinova y su equipo técnico respondieron negando una expulsión injusta y atribuyendo la salida a "conflictos internos y comportamientos incompatibles", incluidas "agresiones verbales" documentadas. Rechazaron que Caballero tuviera "derecho indefinido" por ser fundador y desmintieron haberle silenciado, señalando que fue él quien inició acciones legales "sin previo aviso". También denunciaron "ataques y difamaciones" desde su entorno, reservándose acciones legales. "La libertad de expresión no justifica el acoso", concluyeron. Shinova, cuyo nombre surge de la fusión entre "shin" (nueva vida en japonés) y "nova" (explosión estelar), reflejando su apuesta por renovar el rock sin perder su esencia, por los que se les puede encuadrar dentro del rock independiente más conservardor, alejados de las vanguardias o experimentos atrevidos de bandas como Triángulo de Amor Bizarro, Biznaga, La Paloma o Alcalá Norte. Tras 17 años de carrera y cinco álbumes, han conseguido seducir a miles de fans gracias a éxitos como 'Qué casualidad', 'Berlín', 'La sonrisa intacta', 'Te debo una canción' o 'Mirlo blanco', que los ha llevado a escenarios como el Resurrection Fest o el BBK Live.