Ha tardado en llegar pero ya está aquí. Después de revolucionar la historia del flamenco con el fascinante 'El mal querer', han sido cuatro años de espera para poder disfrutar de la continuación de la que se ha convertido, por méritos propios, en la estrella musical española con mayor proyección e influencia en el pop internacional de la historia. Aunque Rosalía no ha dejado de colaborar y publicar sencillos que no han acabado entrando en este 'Motomami', empezando por el gran éxito de 'Con altura' a otras propuestas de difusión más discreta como 'Dolerme' o 'Juro que', este nuevo lanzamiento ha venido precedido de una gran campaña apoyada fuertemente en redes sociales, con tres sencillos que han despistado en cuanto a su contenido pues eran muy dispares, empezando por la bachata junto a The Weeknd 'La Fama', que aportaba poca originalidad, para luego pasar a 'Saoko', canción que abre el álbum y donde ya anunciaba que su objetivo en este nuevo larga duración era plantear una metamorfosis. El terror llegó con 'Chicken Teriyaki' un tema tan disfrutón como infantil, con un claro objetivo de convertirse en tendencia en la red Tik Tok. Ahora que podemos escuchar el álbum íntegro se puede comprobar que Rosalía sigue estando disfrutando de una etapa de gran creatividad, que ha entregado un disco que supone un paso adelante en su particular evolución musical, donde se combinan ritmos urbanos con reggeatón, electrónica y hasta reminiscencias de su obra maestra ('Bulerías'), todo con un difícil equilibrio entre la comercialidad, la experimentación y el hedonismo propio de la música pop.