'SONGS OF A LOST WORLD', PRIMER ÁLBUM DE THE CURE EN 17 AÑOS
Llevábamos tanto tiempo esperando nuevo álbum de The Cure, con infinidad de idas y venidas, bulos y noticias que jugaban al despiste, que parece mentira que ya esté aquí este 'Songs of a lost world', primera referencia para la banda de Robert Smith en casi lo que llevamos de siglo. La recepción ha sido excelente entre los fans y la crítica musical, destacando esa idea de despedida: por ese tono majestuoso y sosegado, su portada en blanco y negro, así como títulos de canciones como 'I can never say goodbye' (Nunca puedo decir adiós) o 'Endsong' (Canción final), además de la duración de los temas que conecta con su tendencia al desarrollo instrumental sin tener en cuenta la radiofórmula, a la que ya han regalada infinidad de clásicos como 'Boys don't cry', 'Lullaby', 'Close to me' o 'Friday I'm love'. Según anunció su carismático líder, Robert Smith, este nuevo trabajo: «No es muy luminoso, está a medio camino entre 'Disintegration' (1989) y 'The Head On The Door' (1985). Es bastante implacable, lo que atraerá a la audiencia más oscura, no creo que obtengamos ningún sencillo número uno ni nada por el estilo. Ha sido bastante angustioso para mi, como lo ha sido para todos los demás. He sido más privilegiado que la mayoría, pero el encierro y el COVID me han afectado tanto como a todos, además he perdido a toda una generación de tías y tíos en menos de un año. Este ánimo aparece reflejado en el disco».
A pesar de este sabor a despedida, la banda no ha afirmado en ningún momento que sea su último álbum.